El morado y el verde fueron regalos, el primero para la cuidadora de mi gato y el segundo es propiedad de cerrillas, tiene a juego una cinta para un sombrero que... algún día fotografiaré.
El montaje fotográfico es un poco cutre, pero si me esforzara, la publicación nunca vería la luz (ánimo a toda la gente gandula del planeta, también tenemos derecho a vivir).
Próximamente: ¡¡Bob Esponja!!